¿Qué Son Los Fitonutrientes Y Qué Beneficios Tienen?

Fitonutrientes

Si ya conoces mi posición respecto a dieta, sabes que considero que la mejor salud y composición corporal sólo puede ser obtenida mediante una dieta primordialmente carnívora, esto por múltiples razones.

No obstante, bastantes personas siguen teniendo la duda de que si con solo comer carne se pueden obtener todo los nutrientes que el humano necesita, no solo para sobrevivir, sino para prosperar. Bueno pues, habiendo ya aclarado la situación con la Vitamina C y la fibra, sólo resta hablar sobre los famosos fitonutrientes.

Más específicamente, comenzaremos viendo porque estos “fitonutrientes” ni siquiera son nutrientes en primer lugar y, de hecho, su nombre original, su nombre real, es fitoquímicos.


Fitonutrientes o fitoquímicos

Los fitoquímicos, más conocidos comúnmente como “fitonutrientes”—particularmente por los veganos,  son compuestos químicos producidos por las plantas, cuyos generalmente juegan un papel en el crecimiento de la planta o en su defensa contra competidores, patógenos o depredadores (nota el énfasis en “defensa”). Ciertos fitoquímicos se han usado en el pasado, y se siguen sintetizando, como veneno o medicamentos (nota el énfasis en “veneno”).

Por ejemplo, la salicina, cuya tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas, se extrajo originalmente de la corteza del sauce blanco y luego se produjo sintéticamente para convertirse en el medicamento común de venta libre, conocido como aspirina. Similarmente, la cafeína, contenida mayormente en los granos del café—de allí el nombre de la sustancia, actúa como mecanismo de protección contra plagas que traten de consumirlos, esto al alterar el sistema nervioso y adrenérgico de su consumidor—al humano le sucede lo mismo pero en mucho menor escala. 

Algunos fitoquímicos son conocidos como fitotoxinas, siendo estas tóxicas para los humanos. Por ejemplo, el ácido aristolóquico es cancerígeno incluso en dosis bajas. Algunos fitoquímicos son antinutrientes que interfieren con la absorción de nutrientes. Otros, como algunos polifenoles y flavonoides, pueden ser pro-oxidantes si son ingeridos en grandes cantidades (así es, los famosos “polifenoles” y “flavonoides” son pro-oxidantes, no “anti-oxidantes” como suele mencionarse).


Más antinutrientes que nutrientes

Centralmente, los  vegetales «medicinales,» entre ellos los “fitonutrientes,” generalmente hacen cosas que el cuerpo puede hacer por sí mismo. Las plantas solo activan estos procesos de una manera no natural. Por ejemplo, los polifenoles y flavonoides, cuyos son compuestos vegetales usualmente categorizados como”antioxidantes,” son reconocidos por el cuerpo como veneno, por lo tanto, activan una respuesta de estrés («pelear o volar») que confiere sus «beneficios.»

En otras palabras, los fitoquímicos que tanto la modernidad aprecia, funcionan no por una propiedad en sí mismos, sino por la capacidad del cuerpo a adaptarse al estrés impuesto. Me atrevería a decir que un 80-90% de los compuestos conocidos como “saludables” por la comunidad científica, derivan sus efectos benéficos por hormesis, no por un beneficio en sí (estudio).

En síntesis, hormesis es el fenómeno en cuyo, en este caso en el cuerpo humano, un elemento perjudicial es introducido. No obstante, su efecto es de tal magnitud, que el cuerpo al que le fue presentado, en lugar de ser dañado permanentemente por este, lo toma como un estímulo para fortalecerse contra esto, de manera tal, que para la siguiente vez que el mismo tipo de estrés se presente, el cuerpo no sea afectado al estar ya preparado para soportarlo sin ser afectado.

Por ejemplo, el único elemento vegetal que suelo consumir con regularidad y, de hecho, diariamente, es el café—más por gusto que por sus beneficios potenciales. Es ampliamente reconocido que, de ser un consumidor regular de la cafeína, con el tiempo tu cuerpo desarrolla una tolerancia a esta sustancia, a punto tal que, si la dosis se mantiene igual, esta ya no “te hará nada” o, por lo menos, no tendrá un efecto tan efectivo como lo tenía al inicio. Bueno, pues esta es una de las más evidentes representaciones de la hormesis en acción. El cuerpo se ha adaptado tanto a la presencia de este compuesto, que ya no produce una respuesta tan intensa.

De hecho, de nuevo, sin pensarlo mucho, podría decir que 80-90% de los compuestos vegetales “benéficos” activan procesos similares a los del estado de ayuno y el ejercicio intenso. No obstante, similar al ayuno y ejercicio, los fitoquímicos, por supuesto pueden consumirse en exceso, lo cual, al rebasar la capacidad del cuerpo para recuperarse y adaptarse, pueden ocasionar un daño, y ser un total negativo al final. En otras palabras, en cuanto a hormesis, “el veneno está en la dosis.”

Ciertamente, si uno ayuna y ejercita regularmente, y esto le añade la ingestión de compuestos vegetales que fomentan los mismos efectos estresantes para el cuerpo, como lo “antioxidantes,” esto podría resultar perjudicial, y hasta peligroso, tanto a corto como a largo plazo. Debido a esto, no me extraña que personas que siguen la dieta cetogénica tradicional, repleta de “fitonutrientes,” luego se quejan de “fatiga adrenal” y otro tipo de afecciones de naturaleza hormonal. 

En casos como estos, simplemente están introduciendo demasiados elementos estresantes en la ecuación, esto, generalmente al mismo tiempo. Pasan de un dia a otro de no hacer ejercicio y comer la dieta americana estándar, carente de fitoquímicos y repleta de energía rápida—hidratos, a entrenar intensamente todos los días, comer menos calorías que su cuerpo utiliza, no ingerir hidratos, e introducir enormes cantidades de “fitonutrientes;” todos estos elementos de naturaleza estresante por sí mismos. ¿Que se podría esperar?

Personalmente, habiendo mantenido una dieta primordialmente carnívora ya por más de 2 años, intente añadir el cacao a mi dieta en forma de cocoa sin endulzar. Sin embargo, desde el primer dia, comenze a tener dolores de cabeza, los cuales fueron incrementando en intensidad con el pasar de los días, a punto tal que, aun y tras haber dejado de consumir este “alimento” por más de 1 semana, el dolor de cabeza seguía allí. Tras investigar un poco, me encontré con que el cacao suele incrementar la producción de óxido nítrico (NO) en el cerebro (estudio, estudio, estudio, estudio), un compuesto responsable de dilatar las venas, esto, no por la cafeína—compuesto al que mi cuerpo ya está bastante adaptado, sino por su alto contenido de polifenoles, flavonoides, demás compuestos conocidos comúnmente como“antioxidantes” (estudio, estudio).

Reiterativamente, muchos elementos influyen aquí, no estoy diciendo que el consumo de cacao se algo “malo” en sí—algo argumentable. Lo que sí queda claro es que, igual al resto de compuestos vegetales con propiedades “antiinflamatorias” y/o “antioxidantes,” añaden un elemento estresante, cuyo suele sumarse a elementos similares como, en mi caso como ejemplo, una dieta hipocalórica, consumo sustancial de café—alto en “antioxidantes” también, ayuno intermitente, e entrenamiento intenso frecuente. En efecto, todos estos elementos, debido a su naturaleza similar, promueven la producción de NO en el cerebro. Sumándolo todo, se convierte en algo excesivo.

Adicionalmente, no se ha comprobado científicamente la efectividad de los “antioxidantes” vegetales para prevenir enfermedades (estudio, fuente, fuente), por lo que su consumo puede bien ser solo una total perdida de dinero y tiempo. Más al punto, aun y si esto no fuera cierto, aun y si los “antioxidantes” sirvieran, estos beneficios serían obtenidos por una reacción del cuerpo a estos elementos, no porque la exposición a estos compuestos promueven un beneficios en .

Ultimadamente, en comparación con brindar puramente nutrientes como los alimentos de origen animal, aquellos de origen vegetal ciertamente pueden proveer nutrición, pero también incluyen elementos antinutritivos que, dependiendo del cuerpo por el que sean ingeridos, pueden o no resultar en un total negativo. Dicho de otra manera: “los animales son comida, las plantas son medicina.” No obstante, en la mayoría de los casos, el consumo de medicinas para tratar un malestar, no es la mejor elección en primer lugar. Lo mejor siempre será atacar el problema real


Siempre lo mejor es ir a la raíz

Si, la aspirina alivia al dolor e inflamación momentáneamente, pero esto no significa que lo esté curando, solamente lo está ocultando. Esto no puede significar mucho si te duele la cabeza porque tienes resaca y tienes que trabajar. ¿Pero en caso de ser algo más grave, de tener una infección, por decir algo, no saldría peor el “remedio”? La función principal del dolor no es el hacernos sufrir porque sí, sino el señalarnos que algo está mal. En lugar de tratar de taparlo deberíamos identificar el problema raíz y solucionarlo.

Por lógica deductiva, las medicinas, en su gran mayoría, solo sirven para resolver temporalmente ciertos síntomas sin solucionar el problema de verdad—de hecho, ahora mismo, no puedo pensar en una que sirve para resolver el problema de manera verdadera. La aspirina desinflama, pero la causa de la inflamación seguirá allí; la cafeína te da energía, pero la razón de falta de energía seguirá allí. Si se quiere no se vuelva a presentar, siempre lo mejor será solucionar el problema de raíz.

Verdaderamente, muchas compuestos reconocidos como “anticancerígenos” realmente lo son así porque matan células. No solo esto, sino que, en ciertos casos, sin conocerlo, lo hacen de manera indiscriminada—no solo matan células cancerígenas, sino también células sanas. Afortunadamente, en su mayoría solamente funcionan al activar el proceso de autofagia, un proceso diseñado por el cuerpo como medida para obtener alimento en estados de inanición. 

La autofagia se llama así porque «auto» significa uno mismo y «fagia» significa comer. Entonces, el significado literal de la autofagia es «comerse uno mismo.” Este proceso es un mecanismo innato del cuerpo activado en periodos de estrés e inanición , en cuyos la células del cuerpo, al no tener alimento rápidamente accesible a su disposición, recurren a alimentarse de partes defectuosas de sí mismas (proteínas dañadas o orgánulos) o invasores externos patógenos (virus o bacterias).

Gracias mayormente a la autofagia (estudio, estudio), en adición al volcar el cuerpo a la utilización de ácidos grasos y cetonas como combustible primordial (estudio, estudio), es que tanto el ayuno (estudio, estudio) como el ejercicio intenso (estudio, estudio) tienen el potencial para ayudar en la prevención o tratamiento del cáncer (estudio). En otras palabras, los beneficios de la mayoría de los compuestos “medicinales” vegetales pueden ser obtenidos de manera más segura y efectiva mediante la implementación de estrategias activas—ej., ayuno y ejercicio intenso, como el cuerpo lo tiene contemplado, para así no solo cubrir los síntomas, sino solucionar el problema de raíz.


Veredicto final de los fitoquímicos

Considerando todos los elementos vistos, cuyos se resumen en que los fitoquímicos solamente derivan sus potenciales beneficios de la activación de procesos en el cuerpo que él puede realizar por sí mismo dándose las circunstancias requeridas para que esto suceda, no le veo utilidad a estos a excepción de 3 casos:

  1. Se sigue la dieta americana estándar, particularmente de esta no ser hipocalórica.
  2. No se realiza ejercicio intenso con regularidad—o cualquier tipo de ejercicio realmente. 
  3. Se padece de una enfermedad que atenta contra la vida y su cura requiere de acciones de contención inmediatas en cuyas los fitoquímicos pudiesen ayudar.

No obstante, en todos estos casos, la solución real, y la más efectiva como hemos visto, sería solucionar el problema de raíz, es decir, seguir una dieta saludable, realizar algún tipo de entrenamiento de fuerza con regularidad, y no adquirir la enfermedad mediante estos 2 consejos previos en primer lugar—de no ser esta debido a una infección o toxicidad por supuesto. Por lo cual, en esencia, la respuesta final es la misma: los fitoquímicos no son requeridos—en lo absoluto.

Si se quieren obtener los ”beneficios” de los fitoquímicos, lo mejor es estimular los procesos en el cuerpo de los que estos se derivan mediante los caminos paro los que estos fueron hechos. En otras palabras, para activar mecanismos antioxidantes, antiinflamatorios, de hormesis, y de autofagia de manera natural, la opción ideal, y, de hecho, la más natural, no es mediante consumir más, sino consumir menos—ayunar; y no es mediante hacer menos, sino hacer más—hacer ejercicio. Además, contrario al consumo de fitoquímicos, el ayunar y hacer ejercicio mejoran la composición corporal, cuyo considero el factor crucial en cuanto a salud, aptitud, y bienestar físico en general.

En conclusión, en lugar de estar buscando “curas mágicas,” “caminos rápidos,” y “atajos,” toma el camino difícil, el camino del guerrero, el camino verdadero, y haz el trabajo necesario para alcanzar el resultado que estas buscando. Utiliza la dieta primordialmente para obtener nutrición—para lo que está hecha, y deja que el cuerpo se cure y se fortalezca por sí mismo al introducir los elementos activos para los que los procesos de esta naturaleza han sido desarrollados con el paso de la evolución. De nuevo, en su mayoría, no considero a los fitoquímicos algo “malo” de estos ser consumidos en el contexto y la medida correcta, pero definitivamente no los considero necesarios para poder adquirir y mantener un cuerpo optimizado, fuerte, y sano, un cuerpo superior.

 

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4 comentarios en «¿Qué Son Los Fitonutrientes Y Qué Beneficios Tienen?»

  1. Que completa información!

    Que le recomendarias a una persona que se siente cansada y no con mucha energia la mayor parte del tiempo? en mi caso.

    1. Gracias David.

      Primeramente, que vayas con el doctor a que se aseguren que no tienes una enfermedad o deficiencia relevante.

      De no hacerlo el medico, yo te recomendaría hacer un examen de testosterona – total y completa, así como también uno de Hierro en sangre. De ser posible, también de Vitamina D (25-OH).

      Después de tomarlos, prueba una dieta totalmente carnívora por 30 días y ve como te va. La dieta de bistec y huevos, «sin día de trampa,» es una excelente manera de comenzar.

      Ya me dirás como te sientes.

      Saludos.

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